La tecnología como apoyo a la población con necesidades específicas
Por: Itzia Valdez - 30 de Septiembre del 2019
De manera general (cuando menos la mayoría) damos por hecho que podemos hacer cualquier cosa porque tenemos nuestro cuerpo sano, completo y por ende nuestra funcionalidad es normal: y seguramente así es. Sin embargo, también es cierto que no sabemos si mañana esto continuará de la misma manera o pasará algo importante que cambie nuestra circunstancia y nos despierte a una realidad diferente. Esta realidad distinta a la que conocemos es experimentada por miles de personas alrededor del mundo, y aunque es probable que jamás la vivamos de “primera mano”, es importante no considerarla tan ajena ya que el futuro principalmente es incierto.
Pues bien, esta población tiene necesidades muy específicas y aunque son por lo general independientes gracias a su capacidad de adaptación, también requieren cierto apoyo (por mínimo que sea) para poder llevar a cabo aquellas actividades que por lo común constituyen lo más básico de la vida cotidiana, por ejemplo, el interactuar con otro, leer, trasladarse en el transporte, comer, asistir a la escuela o al trabajo o bien, simplemente escuchar.
Afortunadamente hoy en día estas personas ya están siendo atendidas por diversas entidades gubernamentales, no gubernamentales y personas de manera independiente que se han percatado de la situación, pero evidentemente no se dan abasto para poder apoyar a todos aquellos que lo necesitan. De esta forma nos encontramos voluntariado en casas de asistencia; personas que de manera altruista brindan su experiencia y conocimiento a personas con dificultades de aprendizaje; instancias que se dedican a brindar talleres de sensibilización; traductores al LSM (Lengua de Señas Mexicana) en tiempo real para personas con debilidad auditiva; cursos de habilitación a determinados sectores… Pero hay aún mucho por hacer.
Y ¿Qué tal si haciendo uso de la tecnología les podemos facilitar las cosas?
¡Por supuesto que sí! y aunque esta idea no es nueva aún se le puede aprovechar. De hecho, actualmente ya existen numerosas iniciativas tecnológicas que tienen como objetivo esta clase de apoyo por parte de los que no sólo tienen conocimientos, habilidades y deseos de contribuir: tienen visión y decisión puesta en marcha.
Muestra de ello es el interesante proyecto del área de la Bioingeniería Médica ofrecido por Carolina Tejeda, egresada del CETYS Universidad (Centro de Enseñanza Técnica y Superior) y quien es parte de la empresa Soblin, compañía que se ha ocupado del desarrollo de la primera prótesis de pierna biónica en el Noroeste de México. Con tecnología propia (además, mexicana) Tejeda en conjunto con otros colegas desarrollaron prótesis biónicas para miembros inferiores y presentaron exitosamente su proyecto en la Feria Industrial Hannover, Alemania. Estos jóvenes se especializan en el diseño y creación de prótesis utilizando tecnologías avanzadas en IoT (Internet de las cosas) y Mecatrónica.
Por su parte, el Ing. Biónico Luis Armando Bravo, egresado del IPN (Instituto Politécnico Nacional) y creador de Probionics, desarrolló también prótesisbiónicas innovadoras a costos accesibles que cuentan con 5 patentes internacionales. Estas prótesis son controladas a través de los impulsos eléctricos del usuario, lo cual permite mayor dominio, adaptación y gran mejora de su calidad de vida.
Así mismo, Cristhian Prieto, Erick Pérez y cols., estudiantes e ingenieros en Mecatrónica de la UAM (Universidad Autónoma Metropolitana), UNAM (Universidad Autónoma de México) e ITEM (Instituto Tecnológico de México) y creadores de la empresa Microprots (aún en periodo de consolidación), desarrollaron prótesis biónicas y software para rehabilitación asistidas por Realidad Virtual. Esto surgió de la investigación del tipo de discapacidad existente en México, siendo la discapacidad motriz la principal con un 67% de presencia a nivel nacional. Su propuesta consiste en ofrecer una prótesis biónica aunada al software desarrollado por ellos mismos que incluye simuladores en realidad mixta para realizar una rehabilitación integral. Las prótesis cuentan con sistemas de control mioléctrico (control de prótesis a conciencia) y biomecánico (posicionamiento espacial que permite a la prótesis tener reflejos).
¿Y qué hay de las apps?
En el campo específico de las aplicaciones existen muchos ejemplos también a nivel mundial.
Para empezar, la Universidad de Granada, en España, a través del grupo de investigación GEDES de ha desarrollado la app denominada PICAA 2, la cual está principalmente dirigida a personas con TGD (Trastorno Generalizado del Desarrollo) enfocado al TEA (Trastorno del Espectro Autista) y Síndrome de Down. Tal aplicación es un apoyo para mejorar aspectos de la comunicación con el entorno, desarrollo de la memoria o el aprendizaje causa-efecto, dependiendo del caso.
Existe también la app Braille Teacher (basada en el alfabeto Braille Español), la cual fue creada por Comm CISO y cuya finalidad es convertir el Braille en voz humana, permitiendo a su vez el aprendizaje de dicho sistema de una manera simple y práctica. Gracias a ella, cualquier persona puede aprender el sistema Braille, enseñar a personas con debilidad visual o ceguera e interactuar con ellas.
Apoyando a este sector, también existe otra app probada y avalada por la Fundación ONCE: Lazzus.Esta es una app que ha sido desarrollada en Asturias para fungir como un asistente personal que contribuye con la autonomía y movilidad de las personas invidentes gracias a la creación de un “campo de visión auditivo” proporcionando información relevante del entorno en donde se encuentra el usuario, por ejemplo, si existe presencia de algún cruce o escaleras próximas. En la actualidad ya está disponible para iOS y Android.
Di-Capacitados, empresa española dedicada a la atención de personas que cuentan con algún tipo de diversidad funcional, ha desarrollado la app Voicebook, una interesante herramienta diseñada para personas que tienen dificultad para mover las manos afectadas por enfermedades tales como la Esclerosis Múltiple, Trombosis Venosa o Ictus. Esta aplicación, que es un lector de libros digital, permite leer sin necesidad de tocar la pantalla ya que cuenta con posibilidad de manejo a través de comandos de voz, ya sea para elegir un libro, pasar a la siguiente página e incluso añadir marcadores.
También grandes empresas, como Google, se han unido a la causa poniendo su “granito de arena” en el tema de apoyo a personas con necesidades específicas. Tal es el caso del ya conocido Google Maps. Dentro de sus actualizaciones ya ha incorporado la pestaña “rutas accesibles” para personas con movilidad reducida. Así, cuando se configuran las direcciones, en las “Opciones” se configurará “caminar menos”, “menos trasbordos” o “accesible para sillas de ruedas” y se arrojarán resultados teniendo en cuenta las estaciones adaptadas. Así mismo, gracias a las imágenes ofrecidas por la opción Street View los usuarios con necesidades de movilidad específica podrán evaluar previamente la zona a transitar y calcular los riesgos o posibilidades de acceso. Esta nueva consideración ha sido posible gracias a las aportaciones de los usuarios a través de Local guides. Las rutas accesibles ya están disponibles para la Ciudad de México.
Como ya lo habrás notado, las nuevas tecnologías no sólo nos ofrecen grandes comodidades y optimizan nuestros procesos al disminuir los tiempos que normalmente se invierten en los traslados (como al realizar depósitos bancarios o realizar algunas compras), también pueden ayudarnos a mejorar muchos aspectos de la vida cotidiana, pero principalmente pueden ser nuestras grandes aliadas en el momento de apoyar a quienes en otro momento no podrían haber tenido oportunidad de mejorar su calidad de vida.
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